El Ykua Pytá (manantial quieto) es el sitio más representativo para los villarriqueños. Su nombre oficial es Parque Manuel Ortíz Guerrero pero el nombre de Ykua Pytá también se mantiene como tradición oral. Manuel Ortíz Guerrero fue un poeta nacido en Villarrica en el barrio Ybaroty, y es uno de los más grandes consagrados exponentes de la poesía en guaraní.
Con los años varios signos representan este parque que condensa naturaleza y mucho verde, con sus patos que se zambullen en el agua, la familia de carpinchos que desde hace varios años habita en el lugar, el estanque de agua donde puede alquilar botes para pasearse, parque infantil, canchas para diversos deportes, monumentos varios en honor a Ortíz Guerrero e inclusive su tumba donde descansa ahí desde 1983.
En el lugar también se encuentra la "Fuente de los enamorados" cuyas aguas provienen del manantial y según la leyenda, aquellas parejas que la beben quedarán flechados para siempre, en congruencia con el romanticismo que envolvía a la personalidad de Ortíz Guerrero.