Cordillera es el tercer departamento del país y es uno de los más ricos en bellezas naturales por sus serranías, arroyos y cascadas.
El turismo de aventura se aprovecha en Altos y Atyrá donde es posible escalar los cerros y tener una vista privilegiada del manto verde que rodea la zona. En Caraguatay, se encuentra el Parque Nacional de Vapor Cué, que también es el Museo Naval y donde descansan los restos de máquinas y barcos que se enfrentaron en la Guerra de la Triple Alianza.
La Capital de la Fé, Caacupé, congrega a más de un millón y medio de personas cada 8 de Diciembre en el día del festejo de la Virgencita donde paraguayos y visitantes realizan su peregrinaje desde diversos puntos del país para cumplir su promesa.
El lugar de veraneo predilecto más aprovechado es el de San Bernardino, que logró consagrarse como un punto de encuentro para la fiesta y diversión noctura, además del disfrute del Lago Ypacaraí y sus hermosos hoteles cercanos. Y apenas a minutos de esta ciudad, se encuentra Altos, donde uno tiene una magnífica vista del lago y puede deleitarse con buena gastronomía en sus restaurantes.
Atyrá, es una ciudad hermosa, tranquila y tuvo el honor de poseer el título de ser la más limpia de América, y el valor inculcado desde quienes produjeron ese cambio de mentalidad en su población hasta hoy en día se mantiene.
En Tobatí encontrará la Villa Artesanal, con una exposición permanente de artesanía, además de aventurarse con ecoturismo en el cerro del mismo nombre, donde puede practicarse rapel y espeleoturismo en Mbopi Kuá.
Los ritos ancestrales de los Guaicurúes y los Kambá Ra`angá se festejan en los meses de junio y julio, en Emboscada y en Altos, convirtiéndose en una actividad cultural, religiosa e indígena que uno no puede perderse.