Una de las ciudades más antiguas, pues historiadores afirman que se fundó después de Asunción, Itá es la ciudad del "Cántaro y la Miel". Lleva ese subtítulo desde épocas de las primeras reducciones franciscanas, donde Fray Tomás de Aquino enseñó a las mujeres la elaboración de vasijas como medio de subsistencia gracias a la abundancia de barro que había en el lugar.
Hasta hoy día, en esta ciudad quedan las herederas de esta tradición de la elaboración de artesanía en barro, destacándose Doña Rosa Brítez, Juana y Julia Isidre y Marciana Rojas entre otras, que viven a través de su arte y son muy apreciados sus productos.
La Laguna ubicada en el centro mismo de la ciudad también es motivo de historias diversas, pues es una laguna que no se ha secado y encierra cuentos rodeados de fantasía y leyenda sobre su creación.
Entre sus elevaciones se destaca el Cerro Arrúa`i que posee una gruta misteriosa, y pertenece a la cordillera de Ybytypanemá. Esta zona es propicia para turismo de aventura, pesca, safaris fotográficos, recorrer caminos antiguos, etc.
En las aguas del Arroyo Paranambú se acercan los visitantes en días de calor disfrutando de sus hermosos balnearios.
