Capital del Departamento Central, tierra de frutilla y artesanía en barro. Está ubicada a menos de 30 Kms. de Asunción, sobre una pendiente que descansa a orillas del Lago Ypacaraí, la que le favorece con hermosas vistas a San Bernardino y Altos.
Una gran cuna de artesanos que amalgaman con sus manos lo que alguna vez fueron bloques y moldes imperfectos de arcilla, para darles forma y dimensión. Además de sus bellas residencias que se caracterizan por sus famosos "corredores jeré" o pilares que sostienen historia y recuerdos. También, existen numerosas galerías de arte y museos para ser visitados por turistas.
Hoy en día, una floreciente meca de gastronomía internacional y de primer nivel, llena de restaurantes ambientados con alma de arte, buenísima atención y sobriedad. Durante la temporada de Frutilla, esta ciudad abre sus puertas a turistas y visitantes, ofreciendo todo el color de esta noble fruta y sus derivados preparados artesanalmente por los productores, como licor, dulces, tortas y otros postres.
Entre los destinos predilectos de Areguá, se encuentra el Cerro Koi, cuyas piedras octogonales y tubulares, la hacen una de las rarezas geológicas más extraordinarias del mundo, puesto que sólo existen otros dos lugares así en la tierra, ubicados en Canadá y Sudáfrica. El Cerro Chororí también es otra belleza para admirar y visitar.
Además, el Turismo de pesca no es dejado de lado, ya que en Isla Valle, uno puede ir y practicar este deporte bajo la modalidad "pesque y pague".
En 2012, culminaron uno de sus proyectos más importantes para el desarrollo del turismo y su propia comunidad, que es la Playa de Areguá, donde familias, deportistas, niños, jóvenes y adultos, se desenchufan de la ciudad para disfrutar de la playa, su muelle, bungalows, zona de camping y kamastros que ofrecen como panorama, la belleza del Lago Ypacaraí.
